jueves, 30 de julio de 2015

Tipos de mercado: competencia perfecta

La libre competencia.

El mercado de competencia perfecta es aquel en el que existen muchos compradores y vendedores, de forma que ninguno de ellos tiene fuerza suficiente para influir decisivamente sobre el precio.

Al existir gran cantidad de compradores y vendedores la decisión de cada uno de ellos no tiene fuerza suficiente como para alterar el precio de un bien o servicio.  En estos casos, el precio y la cantidad de equilibrio se fijan de forma natural en función de las curvas de oferta y demanda.  Por lo tanto, el precio es un dato que le viene impuesto a la empresa por las condiciones del mercado y sobre el cual no puede influir.

Este precio determinado por la libre competencia será el más reducido posible puesto que todas las empresas se ven obligadas a producir al mínimo coste para asegurarse su posición en el mercado. Ello tiene varias consecuencias:
  • Los consumidores disfrutan de precios más reducidos que en las situaciones de competencia imperfecta.
  • La competencia estimula a las empresas a mejorar la eficiencia técnica y económica, a fin de reducir los costes de producción.  La libre competencia puede convertirse así en un factor de la modernización y del desarrollo tecnológico.
  • Cada empresa, considerada individualmente, no puede alterar el precio aunque incremente o reduzca la cantidad de bienes producidos.  Si ofreciera sus productos a un precio mayor, inmediatamente perdería a todos sus consumidores.  Si, por el contrario, redujera el precio de sus bienes, atraería a todos los consumidores pero no podría satisfacer al conjunto de la demanda.
La situación de competencia perfecta es difícil de encontrar ya que exige el cumplimiento de una serie de requisitos que raras veces se dan en la realidad.  Estos límites a la competencia perfecta son los siguientes:
  • No deben existir diferencias entre los productos ofertados por cada empresa.  Las campañas publicitarias y las políticas de marcas pueden crear diferencias artificiales entre un mismo producto, lo que enmascara la competencia.
  • Es necesario que todos los oferentes y demandantes conozcan las reglas y el funcionamiento del mercado, lo que no siempre ocurre.
  • Se supone que todos los consumidores reaccionan automáticamente ante un cambio en el precio.  En la práctica el consumidor puede mantenerse fiel a una vendedor por muchas razones como la rutina, la ignorancia, la proximidad geográfica, la publicidad, los servicios de ventas,...
  • La competencia perfecta exige que todas las empresas tengan plena facilidad para incorporarse o retirarse de una actividad económica dependiendo de que ésta sea o no lucrativa.  En realidad, esta libertad para entrar o salir del mercado se ve dificultada por varios motivos:
    • Factores de tipo técnico pueden hacer difícil el inicio de la actividad económica por lo que las empresas previamente instaladas disfrutarán de ventajas competitivas.
    • Una empresa puede aprovechar sus recursos (acceso a mercados, fuentes de financiación,...) para abordar otras actividades distintas a las que venía desarrollando.  Ello le sitúa en mejores condiciones que otra empresa que deba partir de cero.  Dichas ventajas se conocen como economías de expansión.
En la competencia perfecta, por tanto, se lleva a cabo la soberanía del consumidor, pues los consumidores deciden a través del mercado qué y cuánto se ha de producir.  

Finalmente hemos de distinguir entre el corto y el largo plazo.  En el corto plazo, el número de oferentes es fijo.  En función de sus funciones de costes y de sus ingresos tendrán muchos beneficios, pocos o incluso pérdidas, y esta situación no es modificable.

En cambio, a largo plazo, la situación cambia ya que la existencia de pérdidas o beneficios afectará a la entrada y salida de empresas en el mercado; si los beneficios son altos, habrá nuevas empresas interesadas en entrar, por lo que la función de oferta se desplazará hacia la derecha, y el precio caerá, haciendo desaparecer los beneficios extraordinarios y quedando los beneficios ordinarios.   Si, por el contrario en el mercado existen pérdidas, las empresas que actúen en este mercado pueden optar por abandonarlo o modificar su combinación de costes de factores productivos.  En este caso, la curva se desplaza hacia la izquierda con lo que el precio subirá haciendo desaparecer las pérdidas de las empresas que hayan decidido quedarse en el mercado.

¿Cómo funciona este mercado?

En el mercado de competencia perfecta debemos partir de la idea de que toda empresa competitiva busca maximizar beneficios en el corto plazo.  La condiciones que debemos cumplir para resolver el mercado de competencia perfecta son las siguientes (debemos conocer función de demanda y función de costes de la empresa):

1. Condición de primer orden: que el ingreso marginal sea igual al coste marginal.  Como estamos en competencia perfecta el ingreso marginal es el precio de equilibrio, con lo cual podríamos escribir la siguiente igualdad:

P = C' = I'

O lo que es lo mismo derivar el beneficio respecto de la cantidad e igualarlo a cero (ingreso y coste marginal representan el comportamiento del ingreso o del coste, según su estudio, respecto de una unidad de producto obtenida).

2. La condición de segundo orden nos dice que dicho punto ha de ser un máximo y no un mínimo. Como la derivada del precio (una constante) respecto de la cantidad es igual a cero, tenemos que la derivada del coste marginal (con signo negativo) respecto de la cantidad debe ser menor que cero. Esto implica, que la función de costes marginales se ha de encontrar en su tramo creciente.

3. Para que la empresa siga en el mercado, aún teniendo pérdidas, éstas deben ser menores que sus costes fijos.  El precio debe ser mayor que el coste variable medio, es decir, mayor que el precio de cierre (es equivalente a exigir que los ingresos totales sean al menos iguales a los costes variables).

Gráficamente:

Durante muchos años, el mercado de jabones y productos de limpieza se comportó como un mercado de competencia perfecta porque las formulas químicas estaban al alcance de cualquier productor (químico) y los costes asociadas para poner en marcha este negocio no era elevado.  En consecuencia existían multitud de empresas y marcas.  Sin embargo, la llegada de los medios de comunicación de masas transformó el sector haciendo que a día de hoy el sector este controlado por unas pocas compañías:
- ¿ la publicidad repercute negativamente sobre las ventas de las pequeñas empresas?
- ¿cómo es la venta en una tienda frente a una gran superficie?
- ¿qué ventajas e inconvenientes presentan ambas situaciones, antes y después de publicidad, para el consumidor?
Bibliografía:

FRANK, R.H, (2001). Microeconomía y conducta. McGraw-Hill.  Madrid.
MANKIW, N.R. (2002). Principios de Economía.  McGraw-Hill.  Madrid.
STIGLITZ, J.E. (1993).  Economía.  Ariel.  Barcelona.

miércoles, 29 de julio de 2015

El proceso de circulación y consumo (II)

El sistema de mercado.

El mercado es toda institución en la que bienes, servicios y factores productivos se intercambian libremente.  Se pueden encontrar mercados muy especializados como la Bolsa, las lonjas de pescado, los mercados de abastos,...

La relación de intercambio entre los distintos bienes, servicios y/o factores productivos constituye el precio.

El funcionamiento del mercado esta determinado por los intereses y expectativas de los compradores (la demanda) y los intereses y expectativas de los vendedores (la oferta).




La demanda.


La demanda de un bien o servicio depende de muchos factores (necesidades del consumidor, poder adquisitivo,...).  Suponiendo que estos factores permanecen estables, cuanto menor es el precio de un bien, mayor es la cantidad de dicho bien que el consumidor esta dispuesto a comprar.

Gráficamente esta relación se puede representar mediante la curva de demanda que expresa la cantidad demandada de un bien a un precio determinado.

Habitualmente, los demás factores que influyen en la demanda no permanecen estables.  En estos casos se producen cambios en la curva de demanda que se denominan desplazamientos de la curva de demanda.  Dichos desplazamientos están motivados principalmente por las siguientes razones:
  • Cambios en la renta de los consumidores: si se incrementa el poder adquisitivo del consumidor éste podrá comprar una mayor cantidad de un bien.  No obstante, este aumento de la cantidad demandada no afecta por igual a todos los tipos de bienes.  Un incremento de la renta del consumidor provoca un mayor consumo de bienes de lujo y reduce la demanda de bienes de inferior calidad y precios llamados bienes inferiores.  Por el contrario, el descenso en la renta determina un menor consumo de bienes de lujo y una mayor demanda de bienes inferiores.
  • Alteración en los precios de los bienes relacionados (sustitutivo o complementario).  En el caso de bienes sustitutivos o concurrentes, el incremento de uno de ellos provoca una mayor demanda del otro, pues puede satisfacer la misma necesidad a un precio menor.  En caso de bienes complementarios, el encarecimiento de uno de ellos, provocará una menor demanda del otro, pues el consumo de ambos esta interrelacionado.
  • Cambio en los gustos o modas de los consumidores, que determinan la preferencia por algún tipo de bien concreto.
  • Una variación en la composición de la población.
  • Una variación en la información de que se dispone.
  • Una variación de la cantidad de crédito de que puede disponerse (que no es ni mas ni menos que un caso mas de cambios en la renta de los consumidores).
  • Una variación de las expectativas (de lo que se espera obtener que puede ser observable a través de la productividad, rentabilidad, valor de uso,...).

La oferta.

La oferta de un bien o servicio también está determinada por muchos factores (posibilidades técnicas, costes de producción, expectativas de beneficio,...).  Suponiendo que estos factores son estables, cuanto mayor es el precio de un bien, mayor es la cantidad de dicho bien que el productor esta dispuesto a vender.  

Gráficamente esta relación se representa mediante la curva de oferta que expresa la cantidad ofertada de un bien a un precio determinado.

Los cambios en la curva de oferta por influencia de otros factores se denominan desplazamientos de la curva de oferta.  Los principales desplazamientos se originan por los siguientes motivos:
  • Mejoras técnicas: los avances tecnológicos pueden posibilitar un abaratamiento de los costes de producción.  El empresario podrá ofertar entonces una mayor cantidad de un bien al mismo precio.
  • Alteración en el precio de los factores productivos: una disminución en el salario, renta o interés permite que se incremente la cantidad ofertada ya que se abaratan los costes de producción.  Sin embargo, un incremento en el salario, renta o interés provoca una reducción en la cantidad ofertada, puesto que se encarecen los costes de producción.


Es importante distinguir tanto para las curvas de oferta como para las curvas de demanda entre desplazamientos en dichas curvas (visto en los gráficos arriba incluidos) y movimientos a lo largo de las curvas:
  • Movimientos a lo largo de la curva de demanda.  Un movimiento a lo largo de la curva de demanda es debida a la variación experimentada por la cantidad demandada cuando varía el precio.  Es decir, no hay desplazamiento de la curva ante una variación en el precio; si por ejemplo estoy comprando una botella de refresco a 1€ el litro, y se produce una variación en el precio, decidiré comprar mas o menos cantidad de refresco pero no me habrá movido de mi curva de demanda.  Normalmente ambos efectos, tanto desplazamiento como movimientos en la curva de demanda suelen aparecer juntos.  Es importante para entender la diferencia que en los desplazamientos no figura el precio como causa (no confundir con el precio de sustitutivo ni de complementario).
  • Movimientos a lo largo de la curva de oferta.  Un movimiento a lo largo de la curva de oferta es debido a la variación experimentada en el precio ofertado cuando varía la cantidad. Por ejemplo, el precio de la margarina sube, y con ello la cantidad ofertada (se produce un movimiento); esta subida de precio podría venir provocada por un desplazamiento de la curva de demanda hacia la derecha (por la subida del bien sustitutivo mantequilla).  Es importante tener en cuenta que la cantidad ofrecida en el mercado puede aumentar y distinguier que este hecho se ha producido:
    • bien porque al subir el precio del bien (a un precio mas alto), dada la curva de oferta, la cantidad producida es mayor, 
    • o bien porque la curva de oferta se ha desplazado, por lo que, dado el precio, la cantidad ofrecida ha aumentado.
Compradores y vendedores, con expectativas e intereses opuestos, deben ponerse de acuerdo en el mercado.  Esta situación se logra cuando la cantidad de bienes que los consumidores están dispuestos a comprar a un precio determinado coincide con la cantidad de bienes que el empresario está dispuesto a vender por ese mismo precio.  Este precio se denomina precio de equilibrio y la cantidad constituye la cantidad de equilibrio.

Gráficamente, el precio y la cantidad de equilibrio se establecen allí donde se cruzan las curvas de oferta y demanda.  Teóricamente, cuando esta situación tienen lugar, todos los productos se venden eliminado excedente y escasez del mercado.

Dado que es necesario que el precio de un bien disminuya para que se incremente la cantidad demandada de dicho bien, los ingresos finales del productor pueden verse seriamente afectados.  Si la cantidad demandada de un bien no se incrementa al ritmo suficiente como para compensar el descenso del precio, los ingresos del productor van a ser inferiores.  Si, por el contrario, la cantidad de bienes demandados compensa con creces el descenso del precio, los ingresos finales serán mayores.

Esta variación en los ingresos finales del productor depende de la elasticidad de la demanda; la cual la definimos como el cociente entre la variación porcentual de la cantidad demandada y la variación porcentual del precio.  Cuanto mayores son los valores numéricos de la elasticidad-precio, mas sensible es la demanda a las variaciones del precio, mientras que cuanto más bajos son, menos sensible es la demanda a las variaciones del precio.

¿Cómo sería la formula?  Descontamos la nueva cantidad a la cantidad inicial (Q1 - Q0) y lo dividímos por la cantidad inicial (Q0).  Hacemos lo mismo con el precio y posteriormente hacemos el cociente del primero término (Q) entre el segundo término (P).  ¿Que resultado podemos obtener?

  • Elasticidad precio (Ep) mayor que 1: la sensibilidad al precio es muy alta, la demanda es elástico y un ejemplo lo encontramos en los bienes de lujo.
  • Elasticidad precio (Ep) menor que 1: en este caso la cantidad demandada cae menos de lo que han subido los precios y recibe el nombre de demanda inelástica.  En este caso estamos hablando de bienes de primera necesidad, como por ejemplo un medicamento donde seguirá habiendo demanda a pesar de la subida de precio.
  • Elasticidad precio (Ep) igual a 1: se define como demanda unitariamente elástica y su realización en la realidad es muy difícil, significa que las variaciones en precios tienen exactamente su mismo reflejo en las variaciones en cantidad.

En el caso de la elasticidad de la oferta, si la subida de un precio de un 1% provoca un aumento de la oferta de más de un 1%, decimos que la curva es elástica (barra de pan), si por el contrario provoca un aumento de la oferta de menos de un 1% decimos que es inelástico (precio del petróleo).

En el caso de la oferta la fórmula que mide la sensibilidad al precio es igual que la fórmula de elasticidad de la demanda con un particularidad, las variaciones de precio y cantidad van en la misma dirección, por tanto la elasticidad tiene signo positivo siempre.


Bibliografía:

STIGLITZ, J.E. (1993).  Economía.  Ariel.  Barcelona.

martes, 28 de julio de 2015

El proceso de circulación y consumo (I)

Mecanismos de distribución: el juego de la oferta y la demanda o la asignación del plan.

El proceso de circulación es el intercambio de los diversos bienes y servicios, utilizando distintos medios técnicos e instrumentos monetarios o financieros.  Gracias a este proceso los bienes y servicios se distribuyen desde los centros de producción hasta llegar a los centros donde son utilizados para sus fines concretos (el consumo en el caso de los bienes de consumo, la producción en el caso de los bienes de capital).

Con el intercambio los bienes y servicios se ponen a disposición del individuo que los necesita, quien, a su vez, pone a disposición de los demás los bienes y servicios que produce.  En teoría, este intercambio es mutuamente beneficioso por varios razones:
  • Los productores pueden especializarse en producir solamente aquellos bienes y servicios para los que estén capacitados.
  • La especialización permite adquirir una mayor habilidad y mejorar las técnicas.
  • Únicamente se necesitan adquirir los recursos imprescindibles para una sola actividad.
Existen dos tipos de intercambio:
  • El trueque que constituye la forma más primitiva de intercambio donde se produce el intercambio de un bien por otro.  Su uso plantea varias consecuencias:
    • La coincidencia de necesidades: el individuo que quiere realizar el trueque se ve obligado a encontrar otra persona dispuesta a ofrecerle el bien que necesita a cambio del bien que le entrega.
    • Indivisibilidad.  El trueque significa que no se reconocen unidades mínimas de valor.  Por lo tanto, no se puede establecer con exactitud el valor de los bienes intercambiados y las equivalencias no siempre son adecuadas.
    • No existe distinción entre comprador y vendedor.
  • El intercambio con dinero.  Se trata de un medio de pago aceptado convencionalmente por una sociedad para ser intercambiado por bienes y servicios.  Propiedades del dinero: debe ser duradero, transportable, divisible y de oferta limitada.  Por otro lado, el dinero cumple las siguientes funciones:
    • Se utiliza como medio de pago.
    • Como unidad de cuenta (medida).
    • Depósito de valor.
    • Representa un patrón de pago diferido.
Un capítulo aparte dentro del proceso de circulación la constituyen los factores productivos (tierra, trabajo y capital).  La característica peculiar de estos factores es que son consumidos por la empresa para producir bienes y servicios.

La distribución y consumo de los factores productivos se denomina asignación de recursos.  Existen dos formas fundamentales de asignación de recursos: la asignación mediante la ley de la oferta y la demanda y la asignación mediante un plan.

La asignación mediante la ley de la oferta y la demanda.

Constituye el método de asignación del sistema capitalista o de mercado.  En este caso, la asignación de recursos pasa por las siguientes fases:
  • Los consumidores revelan sus preferencias al comprar un determinado producto y desestimar otros.
  • Los productos más demandados por el consumidor experimentan un alza de precios.  En consecuencia, estos productos reportarán un mayor beneficio.
  • La competencia entre productores y la búsqueda del máximo beneficio llevan al empresario a producir los bienes mas demandados al menor coste posible de producción.  Dependiendo del precio de los factores de producción (salario, interés y renta), el empresario buscará la combinación más eficaz técnica y económicamente.  Según este criterio se asignarán las cantidades de trabajo, tierra y capital que permitan producir más bienes al mínimo coste.
El mercado, desde el punto de vista económico, constituye toda institución social en la que los bienes y servicios, así como los factores productivos, se intercambian libremente a cambio de entregar una determinada cantidad de dinero: el precio.

Para cada nivel de precios de un bien, existirá una cantidad de dicho bien que los consumidores desean adquirir: función de demanda, y un cantidad que los productores están dispuestos a ofrecer: función de oferta.  El precio para el que la cantidad demandada y la cantidad ofertada coinciden es el precio de equilibrio, mientras que la cantidad intercambiada es la cantidad de equilibrio.


Bajo este modelo de asignación son los consumidores los que dan respuesta a qué producir ya que si un producto no es demandado por los consumidores dejará de producirse.  Sin embargo, el inconveniente de este sistema es que, hoy día, las campañas de publicidad y la presencia masiva de los medios de comunicación hacen muy difícil saber hasta que punto el consumidor elige libremente o esta dirigido por las propias agencias publicitarias.

Finalmente, la oferta y la demanda, en función de la mayor o menor escasez de los bienes y servicios, determinarán el para quién producir.  En este apartado es importante señalar que la demanda de los factores productivos es una demanda derivada, pues depende de que exista demanda de los bienes que ayudan a producir. 


La asignación de recursos a través del plan.

Es el método propio del sistema socialista.  En este caso, las fases de la asignación de recursos son las siguientes:
  • El Estado considera cuáles son los bienes y servicios que necesita la población.
  • Los expertos económicos calculan las cantidades de tierra, trabajo y capital que se necesitan para producir dichos bienes o servicios.
  • Se elaboran los planes económicos (quinquenales/septenales) en los que se asigna a cada empresa las cantidades de cada factor productivo que necesita para producir los bienes y servicios asignados.
El inconveniente de este método es que los planificadores, alejados muchas veces de la realidad de la empresa, no siempre adoptan la combinación más eficaz técnicas o económicamente.  De esta forma es fácil que se produzca un derroche en determinados recursos y haya estrangulamientos por carencia de otros.
Bibliografía:

SLOMAN, J. (1997).  Introducción a la Microeconomía.  Prentice-Hall.  Madrid.
STIGLITZ, J.E. (1993).  Economía.  Ariel.  Barcelona.

lunes, 27 de julio de 2015

El proceso de producción (III)

La empresa como instrumento coordinador de la producción.

La empresa es la unidad de producción.  Combina los factores productivos (tierra, trabajo y capital) para producir bienes y servicios.

El objetivo último de toda empresa es maximizar los beneficios, esto es, procurarse los mayores beneficios posibles reduciendo los costes de producción e incrementando los ingresos obtenidos por la venta de sus bienes o servicios.

En última instancia, los costes de producción son los que más influyen en las decisiones de la empresa pues de ellos dependerá la capacidad de producción de la misma.  Por ello, se deben considerar dos supuestos previos:

La producción y los costes a corto plazo, donde a su vez la empresa distingue en dos tipos de factores de producción:
  • Factores fijos: son los factores cuya cantidad no puede modificarse inmediatamente, como instalaciones, maquinaria,...  Los costes de los factores fijos se denominan costes fijos.
  • Factores variables: son los factores cuya cantidad es susceptible de ser modificada inmediatamente, como la fuerza de trabajo, materias primas, productos semielaborados, etcétera.  Los costes de los factores variables se denominan costes variables.
La suma total de costes fijos y variables constituyen los costes totales.  A corto plazo los costes totales a los que tiene que hacer frente la empresa pueden ser muy elevados por dos razones:
  • Determinados factores fijos recién instalados tienen un coste aunque la empresa no produzca nada (por ejemplo el pago de los intereses por el capital instalado).
  • La empresa aún no ha tenido la experiencia suficiente para determinar la cantidad exacta de cada factor que necesita.  Puede ocurrir que todavía no se haya adoptado la combinación más eficiente técnica o económicamente.
La producción y los costes a largo plazo donde disminuyen por dos motivos:
  • Todos los factores son variables pues la empresa ya ha tenido tiempo de modificar la cantidad de cada uno y ajustarla a los niveles de producción deseados.
  • La experiencia ha dictado cuál es la combinación de factores mas eficiente técnica y/o económicamente.
Para determinar el incremento o reducción de los costes totales se calcula el coste medio que es el cociente entre el coste total y el número de unidades producidas.  De la misma forma se puede calcular el coste marginal que es el incremento adicional de los costes totales cuando se produce una unidad más.  


La empresa, como unidad productiva, actúa a dos niveles:
  • De lado de la oferta, la empresa ofrece los bienes y servicios que produce.
  • De lado de la demanda, la empresa requiere unos factores de producción que necesita para producir sus bienes y servicios.  Esta demanda de tierra, trabajo y capital por parte de la empresa se denomina demanda derivada pues depende de la demanda de los bienes y servicios que produce la empresa por parte del consumidor.
El valor añadido.

Para producir un bien o servicio se necesita la aportación de los factores productivos los cuales proporcionan un valor adicional a dicho bien o servicio.  Este valor adicional suministrado por los factores de producción se conoce como valor añadido.  Matemáticamente el valor añadido es la diferencia entre el valor final del bien producido y el valor de las materias primas y bienes intermedios utilizados en su elaboración.


VALOR AÑADIDO = VALOR FINAL DE F.G.  - (VALOR DE R.M. + VALOR W.I.P)
FG: Finish goods o producto terminado.
RM: Raw materials o materia prima.
WIP: Work In Progress o producto semiterminado o semielaborado


Puesto que los factores productivos aportan un valor adicional a un bien o servicio, es lógico que los dueños de esos factores (el trabajo que aporta su fuerza de trabajo, el propietario de la tierra, el banquero que presta dinero,...) exijan una compensación o pago por ese valor añadido.

La retribución de los factores productivos.

Se denomina retribución de los factores productivos a este pago o compensación, equivalente al valor que aportan los factores productivos, que recibe el propietario de los mismos:
  • La retribución del trabajo es el salario.  Es necesario distinguir entre dos aspectos del salario:
    • salario nominal es la cantidad absoluta de ingresos que recibe el trabajador por la prestación de sus servicios (el salario que figura en la nómina del trabajador).
    • salario real es el que mide la capacidad real de compra de que dispone el trabajador con su salario nominal.  Es decir, se establece por la relación entre el salario nominal y los gastos que debe hacer frente el trabajador en su vida cotidiana.
El salario se establece en el mercado de trabajo, en el que se encuentran las empresas que demandan fuerza de trabajo y la población que la ofrece.  La demanda de trabajo por las empresas depende de varios factores:
    • El nivel salarial: si los salarios son muy elevados la empresa restringe su demanda de fuerza de trabajo.
    • La productividad del trabajo: si el factor trabajo no es muy productivo la empresa recurre a un uso mas intensivo del capital y reduce la mano de obra, con lo que se genera paro estructural (por un cambio tecnológico).
    • El ritmo de la actividad económica: los sectores económicos que son objeto de una fuerte demanda requerirán mas fuerza de trabajo para mantener la actividad.
A su vez, la oferta de fuerza de trabajo depende de:
    • La cantidad de población efectiva.
    • La remuneración del trabajo ante salarios elevados se incrementa la cantidad de población que ofrece su fuerza de trabajo (hasta un punto donde la curva se retrae por la intervención del factor ocio: no todo el mundo esta dispuesto a sacrificar su tiempo libre a cambio de mas salario).
  • La retribución de la tierra es la renta.  La renta es el pago exigido por el valor que aporta la tierra al bien o servicio producido.  La cuantía de la renta varía en función de la productividad y la calidad de los recursos naturales que contiene la tierra.  La característica fundamental de la tierra viene dada porque su oferta es limitada; de ahí que el concepto de renta económica se utilice para designar la retribución de cualquier factor productivo cuya cantidad es finita.
  • La retribución del capital es el interés.  El pago por los servicios del  capital se denomina interés.  El interés también se puede definir como el precio del dinero ya que, habitualmente, el capital físico se adquiere mediante un préstamo.  Cuando el dueño del dinero decide prestarlo esta renunciando a su uso inmediato por lo que exigirá una compensación equivalente al valor que estaría generando (coste de oportunidad).  Esta compensación constituye el interés.  Su cuantía va a depender de:
    • El riesgo de la operación (mayor riesgo de no recuperar el dinero prestado mas interés).
    • La garantía de devolución del préstamo (que exista un aval ante el dinero prestado reduciría el interés).
    • El período para el que se solicita el préstamos (cuando mayor sea el periodo mayor será el tipo de interés).
La demanda de capital por parte de la empresa dependerá de la productividad o rendimiento del capital, que es el conjunto de beneficios que se espera obtener por su utilización.  Si estos beneficios superan al interés que se debe pagar, a la empresa le será mas rentable solicitar el préstamo; de lo contrario, la empresa reducirá la demanda de capital.



Bibliografía:

FRANK, R.H. (2001).  Microeconomía y conducta.  McGraw-Hill.  Madrid.
STIGLITZ, J.E. (1993).  Economía.  Ariel.  Barcelona.

viernes, 24 de julio de 2015

El proceso de producción (II)

La productividad y división técnica del trabajo.

La productividad es la relación existente entre el nivel de producción alcanzado y la cantidad empleada de cada factor de producción; podemos hablar de productividad de la tierra, del capital y del trabajo (además de profundizar en la productividad de multitud de elementos siempre que sean medibles).

Para estimar la productividad se calcula el producto medio que es el cociente entre el volumen total de producción y la cantidad empleada de cada factor.

Para producir, los tres factores se combinan de una manera concreta y constituyen una técnica de producción, que se caracteriza por la utilización de una cantidad determinada de cada factor.  Las técnicas se distinguen entre sí por las diferentes cantidades que emplean de cada factor.

Esta combinación de factores es técnicamente eficiente cuando logra unos niveles altos de producción con una combinación reducida de cada factor.  Esa misma combinación es económicamente eficiente cuando el precio de los factores de producción es el mas barato que se puede encontrar.

La productividad esta relacionada tanto con la ley de rendimientos crecientes como con la ley de rendimientos decrecientes:

  • Ley de rendimientos crecientes:  si permanece constante la cantidad de un factor y se incrementa la cantidad empleada de otros factores, la producción total crece a un ritmo cada vez mayor: origina las llamadas economías de escala.  Esta ley puede explicarse en base a:
    • Determinadas operaciones del proceso productivo sólo deben realizarse una vez (por ejemplo el diseño) por lo que no es necesario repetirlas para que se incremente la producción.
    • Los trabajadores que ya conocen las técnicas y han aprendido las destrezas básicas mejoran sus rendimientos si aumenta la cantidad de los demás factores productivos.
    • La producción de grandes cantidades posibilita la adopción de nuevas técnicas que abaratan los costes.
  • Ley de rendimientos decrecientes: si permanece constante la cantidad de un factor y se incrementa la  cantidad empleada de otros factores, la productividad total crece a un ritmo cada vez menor: originan las llamadas deseconomías de escala.  Esta ley puede explicarse en base a:
    • La gestión de una gran unidad de producción puede resultar más costosa.
    • Las relaciones de trabajo pueden ser menos eficaces en grandes unidades de producción.
Las leyes de rendimientos crecientes y decrecientes dependen del producto marginal.  El producto marginal de un factor productivo es el aumento de producción obtenido por cada nueva unidad empleada de ese factor.

Cuando el producto marginal es cada vez mayor, existen rendimientos crecientes.  Si el producto marginal es cada vez menor, existen rendimientos decrecientes.

La frontera de posibilidades de producción (FPP).

Bien podría este apartado esta incluido dentro de los factores productivos (tierra, capital y trabajo) pero se ha preferido incluir aquí por su relación directa con el concepto de productividad y como queda ésta reflejada al hacer la representación gráfica de la FPP (Frontera de Posibilidades de Producción).

La FPP muestra las distintas combinaciones máximas de productos que podemos obtener en una economía, cuando utilizamos la totalidad de los factores productivos y empleamos la mejor tecnología posible (recurrimos al concepto de técnicamente eficiente).

Para simplificar el análisis, la representación gráfica de la FPP se realizar únicamente para dos bienes (bien A y bien B).  En el gráfico, los puntos de corte con los ejes del gráfico representan las opciones extremas en las que la economía solo produce un bien u otro.  La frontera de posibilidades de producción es una curva combada como consecuencia de la ley de rendimientos decrecientes, ya que la producción hace frente a variables no fijas influyendo en que la decisión de como fabricar sea una tarea cada vez más difícil. 



Los puntos interiores de la FPP implican la existencia de factores productivos que están siendo infrautilizados, o bien que la tecnología empleada no es la mejor de entre las disponibles (un ejemplo claro es el desempleo ya que no estaríamos haciendo uso del factor trabajo en su totalidad).


Los puntos exteriores son inalcanzables con la dotación de factores productivos existentes y la tecnología disponible.  Debería producirse una mejora tecnológica en la fabricación de un bien o ambos para que se produzca un desplazamiento hacia la derecha de la FPP.


Vemos que en esta representación hay que renunciar a una determinada producción de un bien para obtener una mayor cantidad de otro, estamos introduciendo el concepto de coste de oportunidad.

El coste de oportunidad es aquello a lo que hemos de renunciar para obtener alguna otra cosa a cambios.  No se trata de todas las posibilidades que desechamos cuando optamos por una, sino de la mejor de entre todas aquellos a la que renunciamos.

La FPP también nos muestra la existencia de costes de oportunidad y lo encontramos al desplazarnos por la curva, cualquier decisión de producción que tomemos llevará asociado, de forma inexorable, tener que renunciar a otra combinación, y la decisión de fabricar mas de un bien esta en relación directo con reducir la fabricación de otro bien dada la dotación de factores productivos y tecnología disponible.

Un último concepto, al igual que decíamos que la FPP es una curva cóncava por la existencia de rendimientos decrecientes, también cumple ese mismo requisito para informarnos de la existencia de un coste de oportunidad creciente.

La división técnica del trabajo.

La productividad del factor trabajo es el indicador fundamental para medir el desarrollo de las fuerzas productivas.  A tal fin, y según se ha producido el desarrollo tecnológico, el trabajo se ha dividido en varias fases de las que se ha ocupado un trabajador especializado.  Esta fragmentación del proceso de trabajo se conoce como división técnica del trabajo.

La introducción masiva de tecnología en los procesos productivos se inicia con la Revolución Industrial.  En un principio, el trabajo seguía dependiendo del estilo y ritmo de los trabajadores, herederos de la tradición artesanal, y ello significaba pérdidas en eficacia y rentabilidad.

El primer intento de organizar científicamente el trabajo fue diseñado por el ingeniero norteamericano Frederick Taylor (1856 - 1915) a finales del siglo XIX.  Su método, denominado taylorismo se basa en el estudio detallado de las características de cada puesto de trabajo, sus tipos, el tiempo exacto empleado en cada operación, los movimientos mínimos necesarios,...  A partir de este estudio el trabajo humano se fragmenta en operaciones elementales, casi reflejas, que exigen un mínimo esfuerzo.  De esta forma disminuye el tiempo de trabajo dedicado a cada operación, se fija al trabajador en un puesto específico y se limitan los desplazamientos.

A partir de los años 20 y 30 del siglo XX el taylorismo fue perfeccionado por el fordismo, método ensayado por Henry Ford (1863 - 1947) en su factoría automovilística de Detroit.  Las aportaciones del fordismo al taylorismo son dos:
  • Las distintas fases del proceso de trabajo quedan enlazadas por una cadena de montaje, es decir una organización lineal que va desplazando el productos por las diversas etapas de producción, en donde el trabajador oportuno realiza la operación correspondiente.  De esta manera, los desplazamientos se estandarizan en torno a un tiempo comprobable y controlable contribuyendo con ello a la eficiencia del proceso productivo.
  • Los trabajadores deben adaptarse al ritmo al que se van desplazando los productos para evitar estrangulamientos o interrupciones en el proceso.   Con ello el obrero pierde su autonomía.
Las consecuencias del fordismo son varias:
  • Las tareas se simplifican y se reducen a movimientos elementales y repetitivos.
  • Se produce una mayor especialización del trabajo dado que el trabajador sólo conoce su función e ignora el resto del proceso (a menos que la empresa trabaje la polivalencia y la multicompetencia).  Además, hay una mayor división entre las tareas de ejecución, control, diseño y dirección.
  • Se establecen nuevas jerarquías profesionales.  Cada trabajador tiene un nivel de cualificación profesional en función de su categoría laboral.  La remuneración salarial depende de esta última y de la productividad.
A partir de los años 60 y 70 del siglo XX el fordismo pierde eficacia por dos motivos:

  • Razones técnicas:  la cadena de montaje divide el proceso de trabajo en varias fases.  En ocasiones el desarrollo tecnológico en una de estas fases no va acompañado del mismo desarrollo técnico en otros momentos de la producción.  En consecuencia, sobreviven desajustes en el proceso productivo.
  • Razones sociales: la pérdida de autonomía por el trabajador, su sujeción a los ritmos de las máquinas, provocan trastornos físicos y psicológicos (aunque exagerado: Tiempos Modernos (Charles Chaplin).  Ello repercute en una menor eficiencia del trabajador y en un rechazo del sistema fordista por los sindicatos obreros.
Estos factores impulsaron la tendencia hacia la automatización del proceso productivo en el que el trabajador es sustituido por máquinas y robots industriales capaces de realizar tareas repetitivas, complejas e incluso que reportan riesgo para el trabajador.  Este cambio significa empujar la mano de obra directa de la cadena de montaje hacia mano de obra indirecta (supervisión de las máquinas, de la ejecución, gestión y control de proceso productivo, análisis de desviaciones,... ).

En aquellas actividades donde no interesa aplicar la automatización se ha vuelto a prácticas primitivas como el trabajo a domicilio o la subcontratación, que aprovechan la disponibilidad de mano de obra barata.


Bibliografía:

FRANK, R.H. (2001).  Microeconomía y conducta.  McGraw-Hill.  Madrid.
STIGLITZ, J.E. (1993).  Economía.  Ariel.  Barcelona.

jueves, 23 de julio de 2015

El proceso de producción (I)

Factores de producción.

La producción es el proceso a través del cual una serie de recursos básicos es transformada para elaborar un producto.  Este producto puede ser un bien de naturaleza física o un servicio, es decir, una función que se realiza a petición de un usuario.

La Economía distingue varios tipos de bienes:
  • Según su carácter encontramos:
    • Bienes libres: se encuentran ilimitados en cantidad y no son propiedad de nadie (normalmente se usa el ejemplo del agua y aquí lo podemos matizar con el agua de los mares, puesto que el agua dulce en algunas partes del planeta es un bien escaso).
    • Bienes económicos: son bienes escasos en relación con los deseos que hay de ello y por tanto son objeto de estudio de la Economía.
  • Según su finalidad podemos encontrar los siguientes:
    • Bienes de consumo que se destinan a satisfacer las necesidades humanas de forma inmediata.
    • Bienes de capital o bienes de producción que se destinan a producir bienes de consumo u otros bienes de capital.  A su vez, estos bienes comprenden otros dos tipos:
      • Bienes de equipo que se utilizan para mejorar la eficacia del trabajo humano (maquinaria, instalaciones productivas,...).  Normalmente son bienes de inversión.
      • Bienes intermedios son bienes que están en curso de transformación para convertirse en bienes de consumo o de equipo.  También se les conoce como productos semielaborados (WIP: Work In Progress).
  • Según la duración se distinguen:
    • Bienes duraderos: de uso prolongado (un elemento de transporte o una máquina).
    • Bienes fungibles: solo admiten un uso (productos de limpieza como el papel higiénico).
    • Bienes perecederos: se ven afectador por el transcurso del tiempo (cualquier tipo de alimento o producto asociado a una fecha de caducidad).
  • Según la relación de los bienes entre sí podemos diferenciar (veremos la representación gráfica de este tipo de bienes a través de las curvas de indiferencia que mas adelante explicaremos):
    • Bienes concurrentes o sustitutivos que satisfacen una misma necesidad o similar (el recurrente ejemplo de la caña de azúcar y la remolacha o transporte público y vehículo privado).
    • Bienes complementarios donde el uso de uno implica necesariamente el uso del otro (todos los zapatos del par derecho se venden con el par izquierdo).
    • Bienes independientes que no ofrecen vinculación directa entre si.


  • Respecto a como evoluciona la demanda de los bienes económicos ante variaciones en el nivel de renta de los consumidores distinguimos entre bienes normales y bienes inferiores.  Cuando al aumentar la renta de los consumidores desean adquirir una mayor cantidad de un bien, estaremos ante un bien normal.  Si, por el contrario, la cantidad que desean comprar disminuye, se tratará de un bien inferior.  Un caso particular de los bienes inferiores son los bienes Giffen donde ante un aumento en el precio de un bien, el consumidor deseará adquirir aun más unidades del mismo, ¿que ejemplos se nos pueden venir a la cabeza (pista: se dan en casos de pobreza extrema).
  • También podemos clasificar los bienes entre públicos y privados:
    • Bien privado: donde rige la propiedad de incompatibilidad, es decir, las unidades básicas no se comparten ligado al momento de consumo (por ejemplo un vaso de agua que me he bebido no se lo puede beber otra persona).
    • Bien  público o bien social son aquellos en que las unidades básicas pueden ser compartidas por los consumidores y deben cumplir con dos principios: 
      • no rivalidad: hacer uso de un bien no limitar a nadie para poder hacerlo también (escuchar un programa de radio, ver una película en televisión,...).
      • no exclusión:  una vez pagado otro puede disfrutarlo.  Es aquí donde la Economía introduce el concepto del free-ryder o gorrón y un buen ejemplo es el pago de impuestos para la educación cuando existen niños que reciben dicha educación de padres que evitan el pago de dichos impuestos o evaden parte de los mismos, otro ejemplo mas sencillo es cuando en el transporte público se cuela una persona por los tornos de la estación: en inglés también se denomina este concepto como viajero sin billete o polizón).
Los recursos o elementos básicos utilizados en el proceso de producción se denominan factores productivos o de producción.  Habitualmente se clasifican en tres categorías: TIERRA, CAPITAL y TRABAJO.


Los factores productivos se combinarán de la forma que se considere oportuna (dando respuesta a cómo se produce), con el fin de producir los bienes arriba clasificados (dando respuesta a qué se produce) y que serán repartidos de alguna manera (veremos que no es aleatorio) entre los ciudadanos (dando respuesta a para quién se produce).

Factores de producción: Tierra.

Su importancia es fundamental en las actividades agrarias pero actualmente se utiliza en el sentido amplio que abarca desde el espacio físico sobre el que se desarrolla la actividad económica (biodiversidad, paisaje, clima,...) hasta los recursos naturales que contiene (madera, petróleo, hierro, terrenos de labor, aire puro, agua potable...).  Este es un factor productivo que ha sido estudiado con menor detenimiento por la Economía aunque últimamente se observan avances en su estudio en materias como la Economía Ecológica o la Economía Ambiental.

Factores de producción: Capital.

Es el conjunto de recursos de origen no humano ni natural que intervienen en el producción.  Mejoran la eficacia del trabajo humano y potencian la producción.  El capital, en cuanto factor de producción se refiere:
  • al capital físico (maquinaria, instalaciones,...)
  • al capital financiero (fondos disponibles para la compra de capital físico o activos financieros), y
  • al capital humano formado por la educación, formación profesional y el conjunto de conocimientos que incrementan la eficacia del trabajo.  
Ni el capital financiero ni el capital humano serían factores de producción propiamente dichos aunque a efectos de explicación, clasificación y aclaración es conveniente mencionarlos.

Este factor productivo esta compuesto por bienes producidos por el hombre y que sirven para producir bienes o servicios finales.

El capital físico equivale a los bienes de producción.  Se puede clasificar en dos grupos:
  • Capital fijo: es el capital de incorporación y permanece de forma estable en el proceso productivo como por ejemplo maquinaria, edificios para la producción y todo tipo de instalaciones.
  • Capital circulante: es el capital que cambia sucesivamente de forma como las materias primas o productos semielaborados.
Dicho capital esta sujeto a depreciación, ya sea por su uso o desgaste, ya sea porque se vuelva anticuado (obsolescencia).  Para que la capacidad productiva de las empresas y de los países se pueda mantener e incrementar es necesario reemplazar ese capital. 

Factores productivos: Trabajo.

Es la actividad manual o intelectual que interviene en la producción.  Es el factor productivo básico y depende de la cantidad y cualificación de la parte de la población que interviene en la producción.  A tal fin, se suele clasificar a la población en población activa y población inactiva.
  • Por población activa se entiende al conjunto de personas que se dedican directamente a la producción de bienes y servicios o que, sin intervenir realmente en la actividad productiva, se encuentran disponibles para la misma.  Esta definición nos obliga por lo tanto a distinguir entre población ocupada y población parada:
    • Población ocupada es la población que dispone de un trabajo remunerado aunque sea estacional o a tiempo parcial.
    • Población parada es la población que estando en condiciones físicas y mentales aptas para trabajar no encuentra un puesto de trabajo aunque lo solicite.
  • La población inactiva es aquella que no realiza actividades productivas remuneradas y, por lo tanto, su principal función económica es la de consumir.  Constituye un amplio y heterogéneo grupo que incluye jubilados o retirados, población infantil, estudiantes, personas dedicadas a las labores del hogar, rentistas, incapacitados físicos o psíquicos, personas que reciben algún tipo de asistencia benéfica o, finalmente, aquellos individuos que estando disponibles para trabajar no solicitan un empleo.
El volumen de población activa depende de dos factores demográficos básicos: la edad y la distribución por sexos.

La distribución de la población por edades determinar el porcentaje de población activa que incluye a los individuos comprendidos entre los 16 y 67 años (dato de España, con posibilidad de jubilarse a los 65 si se han trabajado 38 años y 6 meses - consultar dato -).  En los países subdesarrollados, con un claro predominio de la población inferior a los 16 años, la tasa de población activa es mucho mas reducida que en los países desarrollados, donde es patente el predominio de poblaciones maduras; por el contrario, en estos países se produce una progresiva disminución de la población activa debido al envejecimiento y al incremento en el número de jubilados.

Por otro lado, la distribución de la población por sexos influye en la medida en que la mujer ha ido incorporándose al mundo laboral.   En este sentido, los antiguos estados socialistas disponían de elevadas tasas de población activa por la casi absoluta incorporación femenina en el mundo laboral (el Estado velaba por la existencia de guarderías y escuelas infantiles).  En los países desarrollados el nivel cultural y el estilo de vida, junto a unas tasas de natalidad muy bajas, favorecen una mayor tasa de población activa femenina.  Por el contrario, en los países subdesarrollados factores culturales o sociológicos, dificultan la incorporación de la mujer al trabajo remunerado.  No obstante, el papel que desempeña la mujer de estos países en determinadas actividades agrícolas de ámbito familiar hacen compleja su exclusión de la población activa (situación que apenas ha cambiado en estos últimos 25 años).

El grado de asistencia social también influye en la importancia de la población activa.  El Estado debe hacer un importante esfuerzo en gasto asistencial (educación, pensiones,...) contando con las aportaciones de una población activa limitada, provocando la existencia de déficit público (es decir, buscar fuentes de financiación externas a la economía que puedan mantener el sistema actual).

La propia actividad económica influye en la distribución de la población activa.  Las regiones dinámicas económicamente experimentan la afluencia de inmigrantes jóvenes, que proporcionan mano de obra barata y abundante para seguir estimulado la economía.  Por el contrario, las regiones deprimidas sufren la emigración de sus jóvenes y la pérdida de mano de obra que posibilita su desarrollo económico.

A nivel internacional, los países que han disfrutado de un fuerte crecimiento económico con necesidad de mano de obra han favorecido la inmigración de trabajadores extranjeros.  A su vez, los países mas atrasados han facilitado esta emigración que les ha permitido reducir sus tasas de paro y les ha suministrado un capital financiero procedente de las remesas de dinero que los emigrantes envían a sus familias.

En la actualidad la cualificación de la mano de obra es mas importante que la cantidad, pues el desarrollo tecnológico y la automatización de la actividad productiva requieren una fuerza de trabajo con una elevada formación.  A tal fin, los gobiernos dedican una parte importante de sus recursos a mejorar los sistemas educativos y la formación profesional.  Las empresas también reinvierten parte de los beneficios en el reciclado profesional de sus trabajadores.  En los países subdesarrollados, con menores recursos económicos, la cualificación profesional es mas deficiente subsistiendo en algunos lugares con altas tasas de analfabetismo (Informe Unesco 2015).

Un fenómeno de creciente importancia en los últimos años es el paro estructural.  El paro estructural es el que se mantiene estable en una sociedad independientemente de los ciclos económicos y se muestra inalterable incluso en fase de prosperidad.

Los factores que determinan la existencia de paro estructural pueden ser varios:
  • Edad de la población.  Los países con importantes porcentajes de población joven tendrán mas dificultades para reducir el paro ya que continuamente se incorporan grandes cantidades de individuos al mercado laboral.  Por lo tanto, los países subdesarrollados tienen tasas de paro más elevadas que los países desarrollados, que cuentan con poblaciones envejecidas.
  • Recursos económicos.  La disponibilidad de recursos económicos facilita la inversión y estimula la actividad económica, con la subsiguiente creación de empleo.  Nuevamente los países subdesarrollados se encuentran en peores condiciones que los países desarrollados.
  • Desarrollo tecnológico.  La automatización y mecanización de los procesos productivos, fundamentalmente en los países desarrollados, afecta doblemente a la población activa:
    • Sustituye mano de obra directa por nuevas profesiones como programadores, técnicos de gestión, investigadores,...
    • Si la tasa de sustitución del empleo generado por la sustitución de mano de obra directa por nuevas profesiones no compensa la pérdida de trabajo por el desarrollo tecnológico, se incrementa la tasa de paro (en media la automatización genera un puesto de trabajo por tres que ya no se pueden recuperar debido al cambio tecnológico).
En ocasiones el paro se oculta artificialmente bajo el subempleo, es decir, puestos de trabajo improductivos o innecesarios.  El subempleo ha sido un fenómeno importante en dos tipos de países:
  • Los antiguos Estados socialistas con el fin de conseguir bajas o nulas tasas de paro.
  • Los países subdesarrollados donde muchos individuos practican actividades improductivas como la venta ambulante, profesiones callejeras o de servicio doméstico.  Dichas actividades constituyen el llamado sector terciario parasitario.
El paro plantea graves problemas económicos:
  • En los países desarrollados origina un fuerte gasto del Estado, que debe garantizar al parado unas mínimas condiciones de vida mediante subsidios de desempleo y demás prestaciones sociales (¿tendríamos aquí ejemplos de free-ryders?.  Por otra parte, el parado ve reducido su poder de compra y consume menos, lo que afecta negativamente a la economía.
  • En los países subdesarrollados las altas tasas de paro determinan que los niveles de consumo sean muy reducidos, por lo que la demanda no puede estimular la economía.  Además, la abundancia de mano de obra sin empelo facilita que los salarios sean reducidos (muchas personas ofreciendo su trabajo a cambio de un sueldo), de forma que no hay alicientes para invertir en maquinaria y tecnología.
Otro dato importante es la distribución de la población por ramas de la actividad económica.  Según este criterio se suele clasificar a la población en tres categorías: sector primario (agricultura, ganadería, pesca y minería), sector secundario (transformación de productos brutos en productos elaborados como industria y artesanía) y sector terciario (donde se ofrecen servicios).  Atendiendo a la importancia de la población empleada en cada uno de estos sectores podemos distinguir varios grupos de países:
  • Países con predominio del sector primario: normalmente países subdesarrollados donde la agricultura apenas esta mecanizada y aún necesita grandes cantidades de mano de obra.
  • Países con predominio del sector secundario: son aquellos países que han iniciado su proceso de industrialización y todavía no han alcanzado un periodo de maduración del mismo (el sector primario empieza a retroceder y el sector servicios a crecer).
  • Países con predominio del sector terciario: encontramos países con agricultura muy mecanizada, industria automatizada y las actividades mas importantes de su economía están relacionadas con la administración, gestión, ocio,...  En algunas literaturas podemos encontrar con la inclusión de un sector cuaternario que vendría a complementar a los sectores primario, secundario y terciario con el valor intangible de la información, abarcando la gestión y distribución de dicha información (semejante a una capa de servicios).

Bibliografía:

MANKIW, N.R. (2002).  Principios de Economía.  McGraw-Hill.  Madrid.
SAMUELSON, P.A. (1999).  Economía.  McGraw-Hill.  Madrid.
SLOMAN, J. (1997).  Introducción a la Macroeconomía.  Prentice-Hall.  Madrid.
STIGLITZ, J.E. (1993).  Economía.  Ariel.  Barcelona.

La naturaleza de la sociedad y la intervención del Estado en la Economía

Teorías económicas a lo largo de la historia podemos decir que existen muchas.  Además, los economistas tenemos la capacidad de hacer cienci...